Transexuales agreden a activista social en la puerta del Ministerio Público

Hace unos días, mientras se encontraba esperando respuesta a un documento sobre una denuncia hecha a la Fiscalía, sobre el robo de sus pertenencias por parte de municipales, Edgardo Díaz Valdivia, activista social, conocido en redes sociales como “el Turry”, fue sorprendido por un grupo de transexuales que es ese momento se encontraban mostrándose en las inmediaciones, los que de manera agresiva acusaron a esta persona de haberlos estado filmando, a lo que el agredido se defendió diciendo que grababa para él, para su página en red social, respuesta que para estas personas no fue suficiente, continuando con su agresión por medio de empujones e insultos de grueso calibre, además de lanzarle objetos.

Al apersonarse la policía, la versión de estas personas fue desacreditar inmediatamente al agraviado, acusándolo incluso de haberles pateado.

Nada de eso se ve sin embargo en el video que el mismo activista subió luego a página en Facebook. En el que, muy por el contrario se evidencia un comportamiento negativo por parte de este grupo, que podría tomarse por soberbio o narcisista, al creer que esta persona les estaba grabando con su celular exclusivamente a ellos, cuando, como se ve desde un principio en el registro fílmico, esta persona llegó a esta dependencia del estado, únicamente a hacer un trámite documentario.

Lo curioso es que momentos antes, al notar de lejos a estas personas, el activista tuvo palabras amables y hasta de admiración por lo organizadas que se veían estas personas.

Sin embargo, este movimiento, curiosamente conformado en su mayoría por hombres, pero que se hace llamar feminista, le mentó incluso hasta la madre, lo llamó maricón y le exigió un respeto – tal como siempre a los demás exigen – respeto que ellos mismos no mostraron.

Llamó la atención ver entre estas personas a un transexual, ex candidato al congreso por “Juntos por el Perú”, conocido como “Gahela”, argumentando frente a la policía haber sido ellos los agredidos, en un claro intento de victimización, lo que se desmiente contundentemente con las imágenes del video.

Muy probablemente, visto lo ocurrido, haya en estas personas cierto afán de llamar la atención, pero, no es esta la manera.

Convendría tengan a bien repensar actitudes como esta que no les deja nada bien ante las evidencias que se muestran.